Este castillo tuvo diferentes períodos de construcción. El lugar es un paso estratégico para mercaderías del sur al norte de Europa. Un lugar perfecto para aduana y cobrar peaje y control militar de la región. Por otra parte, está construido sobre un islote de 110 mts. de largo por 50 mts. de ancho en el lago de Lemán. El lado hacia el agua es muy profundo y debían atacar con barcos. Por ese motivo era utilizado como residencia.

Del lado que da a tierra, es una gran fortaleza con torres y caminos para guardias. Es prácticamente inexpugnable. Los cimientos están incorporados a la roca viva del islote formando una sólida masa.

Su construcción comenzó en el siglo XII con los Saboya. En 1536, Berna expulsó a los saboyanos y lo ocupó hasta 1798. Desde esa fecha hasta hoy es del Cantón Valdense (Vaud) y su capital es Lousana.

Es así que podemos encontrar dos estilos muy diferentes, el medieval (gótico alemán) y otro patio con una arquitectura renacentista. Aunque los arqueólogos encontraron que estuvo ocupado desde la edad del Bronce y luego en la época romana.

Fue ocupado y abandonado en sucesivos períodos. Se lo utilizó como prisión y presidio militar en los grandes sótanos. Fue bodega y almacenes de ramos generales, fue utilizado como polvorín y, durante un tiempo, como hospital.

En la prisión y en los húmedos calabozos del sótano se pudrían los bandidos y los herejes de la región. Chillon fue el lugar de detención, entre 1530 y 1536, de François Bonivard, quien inspiró un poema de Lord Byron en 1816, Le prisonnier de Chillon (El prisionero de Chillon).

En 1887 se fundó una asociación para restaurar el edificio. Tras ser declarado Monumento Histórico en 1891, se llevaron a cabo unas excavaciones que en 1896 alumbraron restos romanos y permitieron comprender mejor la historia del castillo.

Actualmente es la mayor atracción de Suiza con más de 400.000 visitantes por año.

En la maqueta se puede ver las dos murallas construidas del lado que da a tierra. En ambas había corredores para los guardias.